Escribir es un juego de locos, dice John Banville
El mundo se esta convirtiendo en un lugar cada vez mas brutal, asegura el escritor irlandes John Banville, quien acaba de publicar Quirke en San Sebastian (Alfaguara, 2021) a traves de Benjamin Black, seudonimo con el que publica su serie de novela negra protagonizada por el medico forense Quirke; “no me parece que sea muy positivo y que ayude que la ficcion, sobre todo la novela negra, trate de ser todavia mas brutal que el mundo”.
A proposito de la nueva novela que recien ha comenzado a circular en España y pronto llegara a Mexico, el narrador hablo de las mujeres y la extrema violencia que sufren en las series de television y en la mayoria de las novelas negras.
“Si yo fuera una mujer joven estaria en la calle protestando, manifestandome por la violencia que hay en las peliculas, en las series y en las novelas”, señalo el escritor de 75 años, quien dijo que como vivimos en un mundo violento la violencia del mundo se nos pone inmediatamente ante nuestras pantallas, antes incluso de que ocurra.
“Por eso queremos violencia cada vez mas autentica en las pantallas y en la ficcion; creo que esta es una tendencia muy peligrosa; supongo que es asi como hablan los ancianos”, dijo Banville en una charla virtual desde Irlanda con motivo de la aparicion del octavo titulo de la serie de Quirke.
Acepto que ser dos, John Banville, el autor de novelas como El libro de las pruebas y El mar; y ser Benjamin Black, el autor de novelas negras como Pecado y Las invitadas secretas, ha sido divertido, “trato de que mis novelas de Benjamin Black se parezcan a la vida lo mas posible, trato de no ser sentimental, trato de no ser aburrido, pero los libros de Banville tienen inspiracion, pretenden ser un tipo de poesia, mientras que las novelas de Black no”.
El narrador que ve imposible una unificacion en Irlanda porque traeria guerra y muertes, dijo que escribir nunca es una labor facil, que escribir bien siempre le atormenta, que es un juego de locos. “Todas las mañanas me siento delante de mi computadora y todas las mañanas digo: ‘como se hace esto, no se ni como le hice ayer, no se como le voy a hacer hoy. Voy a renunciar’, pero digo: ‘si dejo de escribir, a que me voy a dedicar’, asi que tengo que seguir escribiendo, me obligo a escribir, escribo unas cuantas frases, me interesa, y despues del dia mi mente se queda agotada, sencillamente se para porque no es capaz de escribir. Y empieza el dia siguiente otra vez, el mismo problema”.
Banville tambien reconocio las atrocidades que en su historia ha cometido la iglesia. Aseguro que el sigue sintiendo rabia y vergüenza ante lo que la iglesia les hizo a niños y chicas que estaban embarazadas.
“No puedo pretender que los libros de Benjamin Black no hagan campaña a favor de esta gente, utilizamos cuando escribimos todo lo que podemos en nuestras obras, yo he utilizado el terrible pasado de Irlanda como material de mis novelas, pero no me siento culpable, en cualquier caso no puedo pretender ser alguien que hace campaña social, podria hacerlo, pero seguramente ni yo me lo creeria ni ustedes tampoco”, señalo.
El novelista que obtuvo en 2005 el Premio Bocker y en 2014 el Premio Principe de Asturias de Letras, afirmo no entender a la humanidad ni como surgio ni para que esta aqui, “por eso supongo que escribo, es un intento de comprender algo, esta situacion extraña en la que nos encontramos toda la humanidad en este momento, pero creo que no he aprendido nada”.
Contento por el aislamiento por la pandemia, Banville reconocio que “esta plaga es horrible” y que hay gente que esta pasandola muy mal. “Parece que Dios ha abandonado a los paises latinos, a España, a Italia”.